Atapuerca y Santillana del Mar, referentes arqueológicos mundiales, adhieren a la Marcha Mundial por la Paz y la No Violencia

Ambos municipios, conocidos internacionalmente por sus yacimientos prehistóricos, apuestan por el futuro, apoyando la difusión de la Marcha Mundial por la Paz y la No Violencia en sus respectivos festivales musicales: el II FESTIVAL INTERNACIONAL DE PERCUSIÓN ATAPERCU y el X FESTIVAL DE MÚSICA INFRECUENTE.

Pressenza. Cantabria, 17/05/09.

El municipio de Santillana del Mar, donde están ubicadas las cuevas de Altamira, conocidas como la capilla sixtina del arte prehistórico, ha adherido con entusiasmo a la Marcha Mundial por la Paz y la No-Violencia.

Así lo ha expresado su alcalde Isidoro Rábago, quien afirmó que “en pleno siglo XXI todos debemos contribuir con nuestro granito de arena para construir una sociedad justa”. Rábago destacó también como razones para su adhesión la necesidad de luchar “tan sólo con la fuerza de la palabra”.En estos días igualmente el Ayuntamiento de Atapuerca en Burgos, un municipio ligado también estrechamente a la historia de la humanidad por sus yacimientos arqueológicos, ha dado a conocer su apoyo a la Marcha. Su alcalde, Fernando Gómez Aguado, ha suscrito el principio de esta iniciativa que incide en la acuciante necesidad del desarme y ha afirmado que han sido justamente las guerras las que “tanto daño han hecho a la humanidad y que, en muchos casos, han cambiado el curso de la evolución”, algo a lo que Atapuerca se siente especialmente vinculado.

PAZ A RITMO DE TAMBORES

Como apoyo a la Marcha Mundial, el Ayuntamiento de Santillana del Mar ha dado a conocer que se hará eco de este proyecto en su próximo festival de MÚSICA INFRECUENTE, en septiembre de este año.Por otro lado, Ernesto Schmied, director del FESTIVAL INTERNACIONAL DE PERCUSIÓN ATAPERCU (www.atapercu.es ), se ha comprometido a dar la mayor difusión posible a la Marcha en la segunda edición de este festival, que tendrá lugar en Burgos del 16 al 19 de julio.

Así, dos municipios especialmente ligados a la evolución del hombre pondrán sus esfuerzos -desde el arte- en la difusión de esta iniciativa que aspira, en palabras de sus organizadores, a dejar a la violencia como “una etapa de la prehistoria humana”.